En el proceso de gestación la madre desarrolla pensamientos que acompañan esta espera, por eso se debe promover los buenos pensamientos, expresiones de amor, positivismo, entusiasmo y ganas que ese “SER” sea feliz en la familia.
Hasta el tercer mes de gestación el bebé crece y desarrolla todos sus órganos por lo cual necesita de cuidados en alimentación y estado emocional, en el cuarto mes de gestación; aparecen los reflejos de absorber y tragar, la cabeza empieza a desarrollarse más activamente que el resto del cuerpo y el rostro se define. Sus sentidos también adquieren nuevas habilidades y reacciona con la melodía variada y los sonidos fuertes.
Esto implica que los bebes ya están preparados para escuchar y sentir, ya se comunican contigo ¡qué alegría! a partir de esta etapa debemos aprovechar para fortalecer el vínculo madre- hijo o madre – hija, padre-hijo o padre –hija el tocar con delicadeza el vientre a modo de caricias y decir palabras de amor a los bebés aporta enormemente en su desarrollo emocional equilibrado.
Como están listos para escuchar es necesario hacerles escuchar música suave, hablarle, cantarles, arrullarlos con la voz que se convierte para nuestros bebés en sonidos melódicos, vitales para crear desde los primeros inicios seguridad y confianza, cimientos de la futura personalidad del bebé.
Hablar a tu bebé lo relaja y también relaja a la mamá. Por tanto, la comunicación debe ocupar un lugar importante entre el papá, la mamá y el bebé.